En la Sede Quito se llevó a cabo el «Tercer Diálogo Ciudadano de Cambio Climático», evento organizado por el Ministerio de Ambiente con el objetivo de intercambiar información con la sociedad civil sobre el cambio climático y ciudades sostenibles. Entre las actividades desarrolladas estuvieron una conferencia magistral y mesas de trabajo en las que participaron activistas ambientales y representantes de instituciones sociales, públicas y privadas.
En el marco de la bienvenida a este evento, la viceministra del Ministerio de Ambiente, Daniela Campuzano, se refirió a los problemas que enfrenta el planeta por las malas prácticas ambientales provocadas por el ser humano. Invitó el público a «promover el compromiso con el planeta para empoderarnos de la protección y del cuidado desde nuestras ciudades».
En la conferencia magistral se presentaron los aportes elaborados desde el ámbito académico, la sociedad civil y el Estado. Los panelistas invitados fueron Sheila Serrano, directora del Centro de Investigación de Modelamiento Ambiental de la UPS; Galo Cárdenas, consultor de movilidad de Biciunión/Biciacción; Carolina Zambrano, representante de la Fundación Avina y Jorge Burbano, subsecretario de cambio climático del Ministro del Ambiente.
La investigadora de la UPS Sheila Serrano presentó el tema «Evidencias sobre cambio climático en la ciudad Quito», en donde muestra las variaciones de las temperaturas climáticas. Señaló que las temperaturas mínimas evidencian mayor frío en horas de la madrugada en las zonas ubicadas al norte de la ciudad, mientras que las máximas temperaturas con radiación solar llegan a su límite máximo al medio día, en especial en el nororiente del Distrito Metropolitano. Este tipo de resultados demuestran la frecuencia de eventos extremos en el clima «que aún son aislados pero que se están haciendo visibles», finalizó.
Sobre el tema de movilidad, Cárdenas se refirió al uso de la bicicleta como un medio de transporte para enfrentar el cambio climático y los retos que tienen las ciudades con respecto al uso de la energía. Si bien es cierto uno de los principales componentes dañinos para el ambiente es el CO2 producido en particular por los medios de transporte públicos y privados. En las ciudades el transporte terrestre por carretera contribuye CO2 en un 90.96%, es por ello que la bicicleta se presenta como un medio sostenible y «es una de las opciones para mitigar el cambio climático en las ciudades», finalizó Cárdenas.
Zambrano por su parte hizo una aproximación sobre la importancia en el desarrollo sostenible en las ciudades, lugares en donde se concentran diferentes patrones de consumo, entre ellos de servicios ecosistémicos o generación de desechos, de acumulación de gases efecto invernadero y de consumo de energía. «Las ciudades pueden ser el lugar en donde inicie las trasformaciones sistémicas», dijo al referirse a las iniciativas para generar ciudades para la vida que busquen dignidad humana, respeto a los límites y derechos de la naturaleza.
Por último, Burbano se refirió a las acciones que emprende el Estado frente al cambio climático, rescatando la importancia del trabajo con la sociedad civil para emprender acciones que mejoren las condiciones ambientales como el manejo del agua, el uso de recursos naturales, la contaminación de aire, entre otras.
Posteriormente, los participantes se reunieron en mesas de trabajo para profundizar los problemas y proyectar propuestas sobre este tema. Las conclusiones constituyen un aporte que se incluirá en el mandato ciudadano que el Ministerio de Ambiente entregará a la Organización de las Naciones Unidas en Nueva York, el próximo 22 de abril.